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Gustavo Carmona: el creador del Diablo





El artista riosuceño Gustavo Carmona Vargas fue el contratado por la Junta del Carnaval para construir la efigie de Su Majestad El Diablo que presidió la pasada edición de la Fiesta y que fue incinerada el Miércoles del Carnaval.

Como siempre ocurre, su figura generó opiniones encontradas, aunque en términos generales gozó de aceptación por parte del pueblo riosuceño. Hola Riosucio dialogó con el Maestro Gustavo para que nos contara detalles de la elaboración de la escultura y su percepción general sobre diversos temas relacionados con su obra. 

Hola Riosucio. ¿Cuéntanos algunos detalles técnicos de la efigie y cuánto te demoraste construyéndolo?

Gustavo Carmona. La efigie se construyó con una base de una proporción de 10 metros de altura, sin embargo, al estar en esta particular posición su altura fue de 4.80 teniendo en cuenta la altura de la carroza. Las limitantes de formas y tamaños es la pobre altura que tienen los cableados de energía y demás servicios que lo requieren.

La efigie se construyó en 3 meses lo cual es un tiempo récord para este tipo de obras, fue realizado en estructura metálica y luego se le aportó el material de relleno o poliestireno al cual se le da forma con una serie de herramientas metálicas para finalmente ser forrado en una masa de papel especial.

H.R. ¿De dónde te surgió la idea de mostrarlo así y por qué esa posición al mismo tiempo que los  cachos relativamente cortos?


G.C. Es una posición muy dinámica que contiene dos intenciones, la primera de ellas sería la de alguien que se encuentra descansando o realizando un contacto, dada su altura es una forma de contacto muy amable; sin embargo es de tener presente que el diablo cuida la fiesta para que todo esté en calma y con la otra posición estaba atento con su tridente por si alguien se quería propasar con él. Es una posición que le permite una fácil reacción. Es un diablo de una corporalidad muy robusta la cual es compensada con un rostro muy natural y amable, "no se dejen engañar por los cuernos que si bien no tenían una gran altura si eran portadores de la base más grande de todos los cuernos realizados hasta hoy en una efigie y estructuralmente unas buenas bases hacen que puedas construir un futuro en el carnaval desde lo cultural, empresa y la estrategia en el impacto social con toda con tranquilidad del caso".



H.R. ¿Qué sentiste cuándo lo quemaron? ¿Hubieras querido que se conservara para otro Carnaval?

G.C. Quemarlo es una gran parte, así deberían terminar todas las efigies, realizar un viaje con la vistosidad del momento, mas no terminar tristemente desbaratado y perdido con el pasar de los años en un parqueadero. Claro que sería importante tener la réplica en el café, todas estas obras inspiran a nuevos creadores a tomar iniciativa.

H.R. ¿De los tres diablos que has elaborado, cuál es el que más te ha gustado y recuerdas con mayor cariño?

G.C. Este último es sin lugar a dudas el que más me ha gustado. El que más recuerdo con cariño definitivamente fue el primero que realicé para el día de la quema en el año 2003, se construyó en tiempo record y realizado su cuerpo en cabuya, era bastante interesante para el momento. Fue el punto de partida para muchos proyectos interesantes.

H.R. Los estatutos actuales de la Corporación señalan muchos aspectos puntuales de las efigies de El Diablo. ¿Crees que son limitantes para el artista o lo ves como una verdadera forma de preservar la tradición?

G.C. El tema del color debería ser más amplio, existen colores que si bien son arriesgados hacen parte de acentuar el concepto que en cada edición posee la efigie.

H.R. ¿Qué piensas de la forma cómo se presentó al pueblo este año el cuadro, la develación y  la batucada?

G.C. Pienso que todo en conjunto se encargó de imprimirle energía a toda la experiencia.

H.R. ¿Algún mensaje para aquellos nuevos artistas que quisieran hacer ellos el diablo?

G.C. Que aparte de las ganas de realizarlo deben contar con algo muy importante y es la capacidad de buscar muchas, muchas soluciones a innumerables retos que se presentan!

H.R. ¿Alguna recomendación sobre el particular a las futuras Juntas del Carnaval?

G.C. Los tiempos de construcción son demasiado cortos y esta es una labor física muy fuerte, es necesario tiempos de pausa para realizar ensayos más apropiados a materiales y movimientos.

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