Comunidad de Pasmí: un lugar para visitar en Riosucio

A esta importante comunidad se llega a través de una carretera destapada que la une con el centro poblado de San Lorenzo, pasando por la vereda de Playa Bonita. Debe su nombre en honor al Cacique de los Sonsones Chezmik, del que se derivó “Pasmí”, designación con la que se ha conocido a estos parajes desde hace muchos años y que agrupa a pintorescos sectores llamados San Isidro, Brisas del Río, La Esmeralda, El Poblado, El Paraíso, Fátima y Balboa.

Pasmí es un centro artesanal y agrícola pero también es cuna de leyendas, las que se han transmitido de generación en generación hasta nuestro días, destacándose las siguientes:

El Mohan de Pasmí

Se dice que uno de los primeros pobladores de la zona, que arribó en el S. XIX y era de apellido Andica, tenía pacto con El Diablo, por lo que podía transformarse en el animal que quisiera.

El Espanto de las Tres Cucas

Cuentan los moradores de Pasmí que hace muchos años existía una tienda con ese nombre, Las Tres Cucas, y allí se aparecía El Diablo a las 12 de la noche, bien fuera personificado en un hombre muy alto vestido de negro o como un bulto negro muy grande que obstruía el paso a los transeúntes.

María del Martirio

En la década de los 40 apareció en Pasmí una mujer blanca, de ojos azules y cabellos claros, vestida con un hábito largo café y un gorro marcado con el nombre “María del Martirio”, quien llegó a predicar que el fin del mundo se produciría en 1950 y que sólo sobrevivirían al desastre los que creyeran en ella y le llevaran limosnas. Fue tal su poder de convencimiento que el propio párroco de San Lorenzo creyó en ella. Dormía acompañada de jóvenes doncellas y castigaba a los niños desobedientes con ramas, los cuales eran llevados por sus padres, pues creían que solo La Iluminada les corregiría el rumbo. Un día cualquiera desapareció llevándose una gran cantidad de dinero.

Esta vereda alberga uno de los sitios sagrados de las comunidades indígenas de San Lorenzo, que es a la vez un atractivo natural de singular belleza: las Cascadas de Pasmí, formadas por el río Arconcito al pasar por un terreno escalonado que forma caídas de agua.

DATO:

Pasmí ha sido cuna de importantes líderes como Darío Edgardo Tapasco Bueno, Gobernador del Resguardo en varias oportunidades y Alcalde de Riosucio en el período 2003 – 2007 y Geroncio Bueno, que fue concejal.

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