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La Encubadora: de las ruinas al arte





El nombre de la Encubadora nace de la idea de un lugar para que los artistas sean empíricos o no, tengan un espacio donde fortalecer sus capacidades.

Demostrando que querer es poder, un grupo de jóvenes logró lo que otras personas no hicieron, recuperar un espacio público, sacarlo de las ruinas, y convertirlo en un sitio para vivir el arte en todas sus expresiones. La Encubadora, como es llamado este lugar ubicado en la parte trasera del coliseo municipal, se ha convertido en la casa de colectivos culturales, grupos musicales y de líderes juveniles que con argumentos, han logrado construir toda una propuesta para beneficio de todos los riosuceños.


¿Qué es la Encubadora?

La idea empieza a tomar forma el 14 de febrero de 2014 cuando Julián David Grisales hace una propuesta a la Administración Municipal y a la Junta Directiva del Club de Leones, para recuperar el espacio conocido como el Parque Infantil, en inmediaciones del Coliseo Municipal, el cual desde hacía por lo menos 22 años, se encontraba sumido en el abandono y la marginalidad como consecuencia de la negligencia institucional. 

El 23 de abril de 2014 se inicia el proceso de limpieza del sitio, ayudados por una pequeña cuadrilla de operarios de EMSA. Primero se recogió toda cantidad de basuras: ropa, televisores, empaques de mecatos, desechos de drogas, llantas quemadas, botellas, vidrios rotos, colchones, etc. Ese día se sacaron cuatro volquetas llenas de desechos y se inició con una serie de acciones de recuperación que se fueron extendiendo a otras poblaciones y colectivos como Efecto Sonoro y Los Leones de Zion, quienes acogieron el lugar como sitio de ensayos y reuniones.

Todo mejoró

Después de varias gestiones y de haber realizado eventos culturales como el Rocksucio, se logró darle seguridad a la caseta, habilitar las puertas y adecuarle unos candados para evitar que se metieran personas inescrupulosas. El 22 de febrero de 2016 Julián David Grisales Agudelo presentó la propuesta de recuperación del lugar ante el Concejo Municipal, en el marco de la discusión del Plan de Ordenamiento Territorial. Dicha ponencia fue bien acogida no solo por los concejales, sino también por los arquitectos y técnicos encargados de aquel estudio. El planteamiento de Julián se centró en la necesidad de infraestructura para la educación del arte en el municipio y que dicho espacio era propicio para ello, por lo que no se podía dejar perder o que pasara a mano de particulares.



Acompañamiento

Nos cuenta Julián David que el acompañamiento y atención por parte de la Secretaría de Gobierno ha sido importante, no solo ha agilizado la gestión al interior de la alcaldía sino que ha generado puentes de diálogo importantes con la policía. Dentro de la agenda de trabajo que se tiene con la Administración Municipal está la tenencia del lugar en comodato para disfrute de los colectivos culturales, el mejoramiento en la infraestructura, y generar una oferta cultural permanente.

Objetivo

El objetivo que desde el Efecto Sonoro se ha trazado, es plantar la semilla con miras a hacer de este lugar un futuro Instituto de Bellas Artes para el Ingrumá, en el que las futuras generaciones de artistas riosuceños puedan encontrar un lugar de formación profesional y evitar migrar a otras ciudades.


Dato: 

Para la permanencia en el lugar, La Encubadora se ha inspirado en el movimiento europeo denominado Okupa, que consiste en la penetración en viviendas, lotes, edificios y demás inmuebles en situación de abandono o injustificadamente desocupados, los cuales son reapropiados por grupos de personas para generar un beneficio colectivo, básicamente para poder acceder bien sea a una vivienda digna o a un espacio de integración barrial.

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