Nació en Portachuelo, comunidad de Riosucio enmarcada en el Resguardo Indígena de Cañamomo – Lomaprieta. Desde su infancia su madre, Florinda Vargas, se sentaba con ella y con su hermana Graciela en el pequeño taller de la casa y les enseñaba con mucha paciencia y amor a amasar el barro ancestral para fabricar las callanas, ollas y cazuelas, candeleros, sahumadores, fruteros, tinajas, fogones de carbón, macetas, etc. Cuenta doña Radiela que antiguamente la región de Portachuelo era profusa en familias que trabajaban la alfarería pero que con el paso del tiempo fueron desapareciendo y en el presente la familia Ladino Vargas es la única que se dedica a esta ancestral labor de materializar los sueños a través de la arcilla. Asegura que es conveniente y necesario que el Resguardo Indígena de Cañamomo – Lomaprieta fomente la creación de una escuela de alfarería para que los niños, jóvenes y adultos de la comunidad conserven esta hermosa tradición y no permitan que desaparezca...
Medio digital del Pueblo del Carnaval comprometido con la verdad, el análisis y la inmediatez en los hechos del municipio de Riosucio. Facebook @HolaRiosucio